Esta entrada tiene mucho que ver con la anterior (Por qué dejo que me pegue? http://rincondebasileia.blogspot.com/2009/07/por-que-dejo-que-me-pegue-entrada.html) En ella se explicaba ciertos motivos por los cuales una mujer maltratada aguanta golpe tras golpe ante su verdugo. Aquí más o menos viene a decir lo mismo, pero desde una fórmula más sencilla para entenderlo.
Olivier Clerc, especialista en bienestar y desarrollo personal nacido en Ginebra y afincado hoy en Borgoña, escribió en el año 2005 un libro titulado “La rana que no sabía que estaba hervida… y otras lecciones de vida”. En la introducción dice el autor que “todo es lenguaje, que todo nos habla”. Entre las historias que plantea una lleva el título del libro. Y a ella me voy a referir. Parece ser que esta alegoría fue propuesta por primera vez en el libro de Marty Rubin “The boiled Frog Syndrome”, publicado en 1987.
¿Nunca te has preguntado por qué una mujer maltratada tarda tanto tiempo, años, en salir de una situación que la destruye? ¿Por qué llegan incluso hasta el final, a ser asesinadas, sin tratar de escapar de ese círculo vicioso que las anula? ¿Por qué algunas no denuncian nunca, o retiran la denuncia? ¿Por amor, por miedo? Pero la pregunta que más me he repetido es por qué aguantan la primera bofetada. Para intentarlo explicar con palabras sencillas, tenemos el ejemplo de la parábola de la rana hervida, que (entre otras cosas) nos sirve para explicar el comportamiento de las mujeres maltratadas, y por qué no huyen inmediatamente a la primera agresión física. En pocas palabras,la parábola de la rana hervida se puede resumir así:
Si tú tiras una rana en una cacerola con agua hirviendo, la rana pegará un salto, saldrá disparada lo más lejos posible de la olla y, a poco que la rana pueda, no le vuelves a ver las ancas. La rana se ha salvado.
En cambio, si pones una rana en una olla con agua fría, la rana nada tan feliz. Si subes la temperatura poco a poco, la rana sigue nadando e incluso chapotea en agua templada, y su cuerpo se va acomodando poco a poco a la nueva temperatura. Cuando el agua empieza a estar más caliente que templada, la rana empieza a descolocarse un poco, no entiende qué ocurre, nada desconcertada, ya no chapotea alegremente y se encuentra aturdida. Sigue subiendo la temperatura, y la rana se siente fatigada y somnolienta. Cuando la temperatura del agua está ya realmente caliente, la rana no está en condiciones de huir, no puede saltar, el agua caliente la tiene agarrotada. Y para cuando el agua empieza a hervir, la rana ya no tiene escapatoria posible, y muere cocinada en agua hirviendo.
Su aparato interno para detectar amenazas a la supervivencia está preparado para cambios repentinos en su medio pero no para cambios lentos y graduales. Los cambios a corto plazo de los modelos mentales rutinarios y diarios, se acumulan a lo largo del tiempo y se convierten en cambios en las creencias a largo plazo, profundamente arraizadas. Llegan a creer que lo que les ocurre es normal, que es así como funcionan las cosas y siempre lo ha sido.
De ahí que las mujeres maltratadas no “salten de la olla” al primer guantazo, porque este nunca se produce de forma súbita, sino que se llega a este punto tras muchos meses o incluso años de maltrato psicológico previo, de menosprecio deliberado hasta acabar con cualquier atisbo de autoestima, de sumir a la mujer en un estado de angustia y desesperación del que cree no tener salida, de aislarla de cualquiera que pueda representar un apoyo en su vida, de hacerle creer que no sirve para nada, que es culpa suya y que incluso se lo merece. Es un trabajo constante, a largo plazo, que destroza a la persona psicológicamente, y llega a destruirla físicamente cuando decide que ya está bien de someterse.
Es un experimento rico en enseñanzas. Nos demuestra que un deterioro, si es muy lento, pasa inadvertido y la mayoría de las veces no suscita reacción, ni oposición, ni rebeldía.Pondré un ejemplo para aplicar esta conclusión que nos ofrece Oliver Clerc. Una de ellas es lo que sucede con el deterioro del amor inicial, tan intenso y emocionante muchas veces. Poquito a poco, detalle a detalle, se va desvaneciendo hasta desaparecer. ¿Cómo es posible, se preguntan los amantes, que hayamos llegado a este punto? Ese punto es la indiferencia más absoluta o la agresión más violenta que uno pueda imaginar. Se han ido acumulando silencios, displicencias, rencores, incomprensibles, malas contestaciones, pequeñas agresiones… hasta llegar a ese momento en que la convivencia resulta imposible. Nadie podría decir que esa pareja empezó a funcionar mal a las tres de la tarde del día 24 de enero.
En una mente machista,(suele ser la de todo maltratador) se justifica este proceso de destrucción en la necesidad de una reeducación de la mujer, que cada vez es menos sumisa y más rebelde, respondona y reacia a asumir el verdadero papel que la corresponde a la mujer en una relación, por culpa de la educación feminista que domina al mundo.Puede sonar conspiranoico, pero es cierto.
¿Y cómo logramos salir de esto? Me gustaría tener la respuesta, pero me temo que no es algo que se pueda solucionar de un día para otro. ¿Se puede erradicar el machismo, auténtico germen de la violencia de género? Lo dudo mucho, sinceramente. Si ni siquiera más de medio siglo después de la muerte de Hitler se ha podido erradicar completamente el nazismo como ideología, ¿se puede suprimir una ideología tan difusa como el machismo, que ni siquiera es reconocida como una ideología, y que además muchos padecen y ni siquiera admiten? No creo que sea tan fácil como algunos creen, y para poder proteger a las víctimas, lo principal es que ellas mismas admitan su condición de víctimas y se dejen ayudar, algo que ya de por sí no es nada fácil, pues si la rana está aturdida, fatigada y somnolienta, es difícil que grite pidiendo ayuda.
Todos podemos ayudar a esas mujeres, sin escondernos ni engañarnos a nosotros mismos sin ver ni oir, pensando que no ocurrirá nada, que no es asunto nuestro, que en conflictos de pareja es mejor no meterse y que el maltrato consiste en aguantarlo todo, incluso lo intolerable.
No es así.
No es eso.
IMPOSIBLE HABERLO EXPLICADO MEJOR!!!!! POR UN MOMENTO VOLVÍ A CONVERTIRME EN RANA RECORDANDO MI PASADO, ERES GENIAL SUSANA.
ResponderEliminarBESOS A MONTON.
SE ME OLVIDO DECIRTE, A FINALES DE AGOSTO TENEMOS EL JUICIO, ME GUSTARIA A VER SI HABLAMOS ANTES ¿OK?
ResponderEliminarTE QUIERO GUAPISIMA.
OTRO MONTON DE BESOS, ESTA VEZ CON MUCHOS ABRAZOS TAMBIEN.
GENIAL LA ENTRADA.
BYE NENA
Muy gráfico el ejemplo de la rana hervida!...sólo así se explica que el maltrato sea soportado hasta con pasividad.
ResponderEliminarSobre le cultura del machismo, creo que en nuestro papel de madres las mujeres debemos hacer todo lo posible para que esa estigma no afecte a nuestros hijos, ya sean varones o mujeres. Es en los valores humanos que les inculcamos en donde "prende" o no el germen del respeto al semejante.
Reitero mis felicitaciones por el contenido de este blog!
saludos!!!
Me ha encantado la fábula, así como la manera en que lo has expresado.
ResponderEliminarOjalá se parasen a leerte todos aquellos que se atreven a convertir a la victima en su propio verdugo, llegando incluso a sentenciar que si una mujer aguanta los malos tratos es, sencillamente, porque le gusta.
En cuanto a la erradicación de una lacra tan horrorosa como lo es el machismo, creo que si hay una clave esa es la educación. Lo malo es que tendríamos que empezar por educar a muchos padres para que no transmitiesen y perpetuasen en sus hijos ciertos comportamientos (a veces incluso sin darse cuenta).
Tienes un blog fantástico, de verdad. Espero que sigas alzado la voz muchísimo tiempo más.
Un abrazo enorme.
LA VERDAD ES QUE YO NO LU HUBIESE EXPLICADO MEJOR... ES TRISTE, PERO ES ASI COMO SUCEDE.
ResponderEliminarMuy buena la imágen de la rana que nos ha hecho comprender cómo era posible en algunos casos esa pasividad.
ResponderEliminarUn abrazo y mis felicitación por todo vuestro trabajo.
Ojalá este mensaje llegue a todo el mundo, sea víctima o no.
ResponderEliminarEnhorabuena por esta labor.
Melodias del silencio
De los mejores blogs que he visto últimamente, útil, bien diseñado y sin tapujos, enhorabuena a sus creadores, tienen mi respeto.
ResponderEliminarFdo. una mujer exmaltratada
(disculpar el anonimato, pero creo que me entendereis, gracias)
Gracias por estas palabras, si no te molesta, las voy a tomar prestadas para mi blog. En los últimos días hubo muchas mujeres asesinadas en mi país, incluso varias embarazadas. Como siempre, nadie hace nada, después es muy tarde!!!!!
ResponderEliminarNunca e canses de luchar por esto, seguí siempre adelante.
Besos enormes.........LORENA (sANTA fE, Argentina)
Esta entrada me viene muy bien, justo este fin de semana, una persona que conozco me dijo que no entendía a las mujeres que no querían denunciar o que retiraban las denuncias...que no entendía a las que como yo en su día, aguantabamos tanto....Le intenté explicar que no es tan fácil como se ve desde fuera, que el miedo paraliza, que el miedo y el "no volverá a pasar" nos paralizan, que el miedo, el "no volverá a pasar" y el pensar que te lo mereces, paraliza....pero ella seguía sin entenderlo.
ResponderEliminarCreo que lo voy a colgar en mi blog o lo copiaré y lo imprimiré para enseñarselo a esta persona, con tu permiso, siempre con tu permiso, que sé que lo tengo porque no sería la primera vez que te copio.
Un beso enorme para las dos.
SOY UNA MUJER MALTRATADA GRACIAS POR ESA HERMOSA PARABOLA.
ResponderEliminaraunque yo pase por lo mismo y pense que ese pasado no me molestaria mas ahora se que un soy parte de esa rana y que por muchos lugares del mundo hay ranas
ResponderEliminarhola necesito de su ayuda estoy muy confundida estuve una discusion con mi novio y en esa discusion el me dio una cachetada porque le dije que su mama era una puta pero de verdad fue en momento de rabia y sin querer lo primero q se me vino a la mente fue decirle eso. ahora lo quiero dejar pero no puedo, el me dice q yo tuve la culpa por haberle dicho eso, me pidio perdon incluso lloro y mepidio disculpa q jamas iba a volver a pasar pero que por favor no nombra a su mama parA DECIRLE MALAS PALABRAS, NECESITO UNOS CONSEJOS:(
ResponderEliminarHola anónimo, agradecer tu paso por aquí. Bajo mi punto de vista, estuvo feo la actuación de ambos, ni se pega, ni se falta el respeto a nadie, pero soy consciente que en medio de una discusión, no siempre nos podemos controlar. Tú no debiste decir eso, pues no te gustaría oir eso de tu madre, pero él nunca debió de levantar la mano.
ResponderEliminarSi entre vosotros se acabó el cariño y el amor, estás en tu derecho de dejarle, pero debes explicárselo así, dejarle claro que el motivo es otro distinto al altercado que tuvísteis.
Eso sí, ten presente que esa bofetada no fué por tu culpa, la violencia no se justifica con esos pretextos.
Un saludo
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